Situada en la Île de la Cité, esta impresionante e íntima capilla, consagrada el 26 de abril de 1248, es además Patrimonio de la Humanidad.
Construido en tan solo 7 años, Sainte-Chapelle sigue siendo un edificio importante por motivos políticos y religiosos. El palacio medieval Palais de la Cité fue residencia de los reyes de Francia hasta el siglo XIV y realmente puedes sentir la historia aquí. El poderoso monarca San Luis se convirtió en líder del cristianismo occidental por tener la corona de espinas de Cristo y otras reliquias sagradas .
Los paneles de 15 metros de altura que conforman esos maravillosos vitrales representan 1.113 escenas del Antiguo y Nuevo Testamento, que cuentan la historia del mundo hasta la llegada de las reliquias a París. No hay nada tan bonito como ver la luz que penetra por esos vitrales de 15 metros de altura, iluminando el piso de la capilla en un día soleado.
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